En un hito del reciente alto el fuego, Hamas liberó este lunes a 20 rehenes vivos que estuvieron cautivos en Gaza por más de dos años. Los prisioneros fueron entregados al Comité Internacional de la Cruz Roja y transferidos a fuerzas israelíes. Entre ellos, tres argentinos: los hermanos David y Ariel Cunio, y Eitan Horn. Sus historias de horror y esperanza conmueven a Israel y a la comunidad argentina, en un conflicto que ha marcado a miles desde octubre de 2023.
El primer grupo de liberaciones: detalles del intercambio
El anuncio lo realizó Khalil Al-Hayya, de la delegación de Hamas, quien confirmó que esta es la primera fase de un acuerdo que pone fin a una etapa de la guerra. Pasadas las 08:00 hora de Tel Aviv, se liberaron los primeros siete: Matan Angrest, Gali y Ziv Berman, Alon Ohel, Eitan Mor, Omri Miran y Guy Gilboa. El resto, incluyendo a los argentinos, salió minutos antes de las 11:00.
Estos rehenes fueron secuestrados el 7 de octubre de 2023, en el ataque de Hamas que dejó más de 1.200 muertos y 250 cautivos en Israel. El grupo terrorista los retuvo en Gaza como parte de su estrategia en el conflicto.
Los hermanos Cunio: un calvario familiar
David y Ariel Cunio, de origen argentino, fueron capturados en el kibutz Nir Oz, cerca de la frontera con Gaza. Su familia, una de las más golpeadas, perdió ocho miembros en el ataque. La abuela Ester casi es secuestrada, pero se salvó con un ingenioso intercambio: al no entender hebreo, le dijo al miliciano: «Soy de Argentina, donde es Messi». El atacante, fan del astro, se calmó, le devolvió sus armas y hasta posó para una foto.
David, secuestrado con su esposa Sharon Aloni Cunio y sus hijas mellizas Yuli y Emma (de tres años), vio a su familia liberada en noviembre de 2023. Él permaneció solo, sin contacto exterior, hasta ahora. Ariel fue tomado con su novia Arbel Yehud, a quien envió un mensaje desesperado: «Estamos en una película de terror». Arbel salió en enero, pero Ariel esperó hasta este lunes.
Los Cunio representan el lazo entre Argentina e Israel, con una numerosa comunidad binacional. Su liberación trae alivio, pero también recuerdos del trauma.
Eitan Horn: la espera de un padre y un voluntario
El tercer argentino es Eitan Horn, capturado en Nir Oz junto a su hermano Iair durante una festividad religiosa. Se refugiaron en un cuarto seguro y llamaron a su padre, Itzkin: «Te olvidaste que en el kibutz los misiles pasan por encima», dijo Iair para calmarlo. Fue la última voz que oyó el padre.
Iair fue liberado en febrero, pero Eitan, educador y voluntario en proyectos juveniles en Israel y Perú, resistió hasta hoy. «Siempre supimos que iba a volver. Lo esperábamos cada día», dijo un primo. Itzkin pasó horas frente al televisor, sin noticias, hasta confirmar el secuestro al día siguiente.
Contexto argentino: víctimas y liberados
Más de 20 argentinos fueron afectados directamente por el ataque de Hamas. Cinco murieron: Kfir y Ariel Bibas, Shiri Silberman, Ron Sherman y Lior Rudaeff. Doce ya habían sido liberados en fases previas, como Gabriela y Mia Leimberg, Karina, Mika y Yuval Engelbert, Clara y Fernando Marman, Luis Har, Ofelia Feler de Roitman, Yarden Bibas, y las pequeñas Yuli y Emma Cunio.
Esta liberación es un paso hacia la reconciliación, pero el conflicto deja cicatrices profundas en la diáspora argentina-israelí.
El intercambio: Israel libera presos palestinos
Como contraparte, Israel excarceló a casi 2.000 presos palestinos desde la prisión de Ofer, en Cisjordania. Incluye 250 condenados a perpetua por atentados graves. Autobuses partieron este lunes, sellando el acuerdo de alto el fuego.
Autoridades israelíes lo describen como «el final de una etapa del horror». Para los rehenes, es el comienzo de la recuperación; para las familias argentinas, un cierre emotivo tras años de incertidumbre.