Con el descenso de la marejada, se hizo evidente el aumento de residuos en nuestras playas, convirtiéndose en uno de los problemas más importantes para la conservación de nuestro entorno natural y la protección de especies.
Esta tarde, en la zona costera de km5 y la costanera, se observó un panorama desolador: plásticos, botellas y otros desechos esparcidos sin control.