Miguel Zárate, un vecino que se gana la vida con ventas ambulantes, ha levantado la voz sobre las dificultades que enfrenta diariamente en las calles de Comodoro Rivadavia. En particular, señala que las garitas ubicadas en el centro de la ciudad están diseñadas sin considerar la accesibilidad para personas con discapacidad. Estas estructuras, elevadas sobre el cordón de la vereda, imposibilitan el acceso para aquellos que se desplazan en silla de ruedas.