Por decreto, es decir sin el necesario pase por el Congreso, el presidente Javier Milei autorizó el ingreso de tropas extranjeras y el egreso de las propias a otros países.
En el plano internacional, Argentina quedó nuevamente del lugar incorrecto. Fue cuando votó, al igual que Israel, en contra del proyecto presentado por Egipto para que Medio Oriente sea declarada zona preservada de armas nucleares.
En la Marcha del Orgullo hubo, como se prevía, consignas contrarias a Milei. Sonó insistentemente «Fanático» de Lali, que se esperaba la interprete en vivo por la noche.
Todo esto y más en el informe diario del periodista Saúl Gherscovici: