Bruno Napoli, autor del libro La dictadura del capital financiero comentó en ABC Radio por FM Records que “Es un poco recorrer la historia de los últimos 50 años, pero para entender lo que sucede hoy. La economía financiera, que es especialmente la no productiva de los bancos, y Argentina tendría que tener un 90% de economía productiva y sólo un 10% de la financiera”.
“La verdad es que hoy ocupa más tiempos y atención que la economía productiva porque no tenés Ministerio de Economía, de Producción e Industria generando trabajo genuino e industrializando el país. Lo que hay es un ministro de economía, un presidente del Banco Central y un asesor como Sturzenegger que un delincuente que están todo el tiempo midiendo la especulación pura”, explicó.
Para Napoli, “Ese cambio se dio hace 50 años en el país y nunca más se modificó en ninguno de los gobiernos de la democracia. La ley de entidades financieras es de 1977 y todavía esta vigente y es una ley que tendía a concentrar el capital financiero en muy pocas manos, eso lo encontramos en las investigaciones que realizamos”.
“A principios de los ’90 hubo una preminencia del capital financiero cuando se modificaron algunas leyes que permitieron hacer millones de dólares con deuda estatal, que pagamos todos nuestros impuestos. Eso se profundizó durante esos años prestándole los bancos plata al Estado y ellos los podían vender haciendo millonadas con deudas del Estado. Pasó a ser un gran negocio prestarle al Estado bobo argentino y que se tengan que pagar todos los meses esos intereses”, agregó.
Napoli resaltó que “Ahora se mandó el oro a Londres y el Banco Central lo puede hacer, el país no lo hacía desde hace años porque siempre estaba a tiro de embargos. El problema de deuda argentino empezó hace 50 años con 6.000 millones de dólares y hoy creció a 470.000 millones de dólares debiéndole mucha plata con legislación extranjera y con riesgo de embargo. Lo que se busca ahora es depositar el oro para obtener créditos express, pero lo más probable es que se pierda ese oro”.
Finalmente sentenció que “Caputo, Bausili y Sturzenegger estuvieron en los negocios del megacanje y se cobraron sus comisiones, en el 2015 vuelven y hacen la fuga más grande del FMI con 70.000 millones de dólares; y ahora se llevan el oro afuera, ese oro no vuelve más. El tema es que nunca les pasa nada y son impunes”.