La policía de Playa Union desactivó una fiesta clandestina en la madrugada del 1 de enero, en la que se encontraban más de 300 personas. El evento se realizaba en un patio de la calle Zorrilla Sánchez 1430, intersección Calle Heredia.
Según el relato policial, los efectivos se dirigieron al lugar. Al llegar, encontraron a un gran número de personas bailando y consumiendo bebidas alcohólicas. El evento contaba con baños químicos, un DJ y se vendían entradas.
Los policías desalojaron a todas las personas del lugar y labraron un acta de constatación. El propietario del inmueble, S. L. D, quedó imputado.
