Ricardo Gené, médico y docente de 79 años, relató a LU4 que “Yo tenía la idea de hacer una relación entre 40 años de atención y docencia en Buenos Aires y lo que fueron los últimos cuatro en la Universidad de La Matanza después de jubilarme. Esa fue una experiencia muy gratificante y cuando la escuché a Anita Fernández -nieta de desaparecidos- haciéndolo en el subte me decidí a hacerlo yo también”.
Luego recordó que “La escuché a ella y me dije, esto es lo que tengo que hacer. Sin ninguna preparación se los mostré a mi compañera, a mis hijos, amigos y algunos compañeros que me impulsaron a hacerlo. Así que decidí salir y sólo me encontré con unos pocos que criticaron, pero la mayoría me agradeció y aplaudió”.
Finalmente ponderó que “La gente se emociona porque al escucharnos esta tomando dimensión de los peligros a los que nos enfrentamos. No se trata de decir que la salud o la educación pública están fenomenal, pero debemos preguntarnos si para mejorarlos hay que destruirlas, yo creo que no. Esto me hacer recordar a la frase ramal que para, ramal que cierra. Si se cierra la educación pública se van a necesitar más de 50 años para recuperarlas”.