El Juzgado de Trabajo Nº 13 de la Ciudad de Buenos Aires aceptó el viernes una medida cautelar presentada por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) y les eximió de pagar el Impuesto a las Ganancias, comunicó el gremio en sus redes sociales.
«La justicia hizo lugar a la medida cautelar presentada por CTERA y ordena la suspensión del Impuesto a las Ganancias para lxs docentes. Desde UTE (Unión de Trabajadores del Estado, central obrera a la que pertenece el colectivo de educadores) seguimos sosteniendo que el salario no es ganancia. ¡Un gran triunfo de la CTERA!», publicó el sindicato.
El tribunal suspendió los artículos 73, 81 y 94 de la ley 27.743 que regula el mínimo no imponible para que un trabajador pague renta por lo obtenido.
De momento, el mínimo no imponible es de 1.800.000 pesos brutos (1.300 dólares) para solteros, 2.094.798 brutos para soltero con dos hijos (1.550 dólares) y 2.366.000 brutos (1.750 dólares) para casados con dos hijos. En tanto que el salario mínimo se encuentra en los 183,6 dólares.
El tributo alcanza a unas 800.000 personas, en una economía que se caracteriza por sus altos niveles de informalidad.
Con los últimos aumentos dispuestos, el sueldo de un maestro de grado inicial/jornada simple ascenderá a 500.045 pesos (370 dólares), aunque a ese número hay que sumarle horas adicionales y la mayoría de los maestros cuentan con más de un cargo para poder subsistir.
Según datos oficiales de esta semana, una familia necesitó 900.648 pesos (667 dólares) en julio para no ser pobre. (Sputnik)