La Supervisión Escolar de la Región VI cierra y ordena la supresión de cargos docentes, afectando gravemente tanto a los estudiantes como a los trabajadores de la educación. La medida, que incluye la cesación de docentes que han estado frente a alumnos desde el inicio del año, ha generado un clima de incertidumbre y malestar en la comunidad educativa.
La situación se agrava aún más considerando que existen 44 cargos sin cubrir, lo que resulta en una falta de personal docente que afecta directamente la calidad educativa. Esto ha llevado a un hacinamiento de estudiantes en otras escuelas, exacerbando la precaria situación.
La decisión de la Supervisión Escolar ha sido denunciada como una vulneración de los derechos a la educación, dejando a alumnos sin docentes y generando un impacto negativo en el desarrollo académico y personal de los estudiantes. Se exige una revisión urgente de esta medida y se demanda una solución que garantice el acceso a una educación de calidad para todos los estudiantes, así como la estabilidad laboral de los trabajadores de la educación.